PRINCIPALES MOTIVOS POR LOS QUE FALLA UNA INSEMINACIÓN ARTIFICIAL
¿Qué es la inseminación artificial?
La inseminación artificial forma parte de las diferentes técnicas disponibles en reproducción asistida que nos ayudarán a aumentar las posibilidades de conseguir un embarazo en determinadas pacientes. Es una técnica muy utilizada, sencilla y poco invasiva.
La inseminación conlleva una serie de etapas y tiene una duración total de 15 días aproximadamente. El tratamiento se inicia con el ciclo menstrual, es decir, dentro de los tres primeros días de la regla. En primer lugar se realiza la estimulación ovárica mediante medicación hormonal que se administra de forma subcutánea.
A los 10-12 de tratamiento, tras comprobar mediante ecografía el crecimiento de los folículos en el ovario, se administra la medicación encargada de provocar la ovulación y de esta forma elegir el día y la hora más adecuada para realizar la inseminación (introducción dentro del útero del semen previamente preparado en el laboratorio).
Posteriormente, a diferencia del resto de las técnicas de reproducción asistida, en el caso de la inseminación artificial, la fecundación tiene lugar dentro de la mujer y no en el laboratorio. Es lo más cercano al procedimiento natural para conseguir quedarse embarazada.
¿En qué casos se aconseja el tratamiento de inseminación artificial?
Es una técnica indicada en parejas que llevan un tiempo manteniendo relaciones sexuales periódicas sin llegar a quedarse embarazadas. Dado que la inseminación es una técnica sencilla, no es eficaz en todos los casos, sobre todo en aquellos más severos.
Uno de los principales requisitos para aconsejar la inseminación artificial es la edad de la mujer. Es aconsejable que la mujer no tenga más de 35-38 años, buena reserva ovárica y las trompas de Falopio funcionales, así como una buena calidad de espermatozoides.
Existen otras circunstancias en las que la inseminación puede estar indicada:
- Síndrome de ovario poliquístico.
- Alteraciones de la ovulación.
- Anomalías en el cuello del útero como la estenosis cervical.
- Mujeres con dificultades para mantener relaciones sexuales como el vaginismo.
- Mujeres sin pareja masculina u homosexuales mediante el uso de semen de donante.
¿Qué requisitos deben cumplir los pacientes para realizarse el tratamiento de inseminación artificial?
Tras consultar por deseo genésico y dificultades para conseguir un embarazo deberemos realizar un estudio básico tanto a la mujer como al hombre mediante:
- Analítica general, hormonal y de enfermedades infecciosas (VHB, VHC, Lúes y VIH).
- Ecografía ginecológica para valorar la forma del útero y los ovarios, principalmente realizamos un recuento de los folículos antrales que nos orientarán sobre la reserva ovárica o nos permiten identificar características como ovarios poliquísticos.
- Estudio de la funcionalidad de las trompas (histerosalpingografía)
Motivos por los que fracasa la inseminación artificial.
Al ser una técnica sencilla es el tratamiento que ofrece las tasas de embarazo más bajas dentro de todas las técnicas de reproducción asistida (fecundación in vitro o donación de ovocitos).
Las posibilidades de embarazo dependerán de cada caso, ya que dependen de la edad, reserva ovárica, tiempo de esterilidad, calidad del semen, etc.
Aproximadamente una de cada cuatro mujeres (25%), que cumplen las características anteriormente explicadas consigue quedarse embarazada con la inseminación artificial, como máximo después de cuatro ciclos de tratamiento.
Existen varios factores que pueden justificar que no consigamos embarazo con la inseminación artificial, entre los que destacan:
- La edad. A mayor edad va disminuyendo la probabilidad de conseguir embarazo. La probabilidad de éxito desciende a partir de los 35 años y el descenso es más drástico a partir de los 38 años.
- El tiempo de esterilidad: parejas lleven muchos años buscando embarazo tendrán menores probabilidades de éxito y habrá que hacer estudios adicionales para averiguar más causas de esterilidad.
- Calidad del semen. La muestra de semen de la pareja o del donante en su caso debe presentar valores de buena calidad (movilidad y morfología) así como cantidad.
- Respuesta inadecuada a la estimulación ovárica. No todas las mujeres responden a la misma medicación por lo que en un siguiente tratamiento hay que plantearse el cambio de medicación o incluso la dosis utilizada.
- Otras causas de infertilidad: No todos los casos de infertilidad pueden resolverse mediante la inseminación artificial. Cuando una mujer no consigue quedarse embarazada mediante la ayuda de la inseminación artificial habrá que ampliar el estudio realizado.
Qué hacer tras un fracaso en el tratamiento de inseminación artificial.
Tras realizar la inseminación artificial y no conseguir embarazo habrá que intentar identificar el motivo del fracaso. Este no siempre es sencillo. Hay que valorar diferentes factores, todo dependerá de la causa que dificulta el embarazo, es decir, del perfil de la mujer y de la pareja:
- La respuesta ovárica a la estimulación.
- La respuesta uterina (endometrio) a la estimulación.
- La presencia de alteraciones uterinas no diagnosticadas por ecografía.
- Las características del semen en el momento de la inseminación.
Con toda esta información la ginecóloga puede recomendar la realización de nuevas pruebas a realizar y recomendar a la paciente o a la pareja la realización de otra inseminación artificial o si por el contrario se aconseja cambiar de técnica de reproducción como la fecundación in vitro.
Esperamos que esta nueva entrada en nuestro blog os haya ayudado a resolver vuestras dudas sobre los motivos por los que fracasa una Inseminación Artificial y las recomendaciones posteriores, cualquier duda, tenéis a nuestro equipo de especialistas en fertilidad solicitando una primera visita médica gratuita
Un fuerte abrazo de parte de todo el equipo de Instituto de Fertilidad