Tu puedes decidir cuando ser madre pero solo si conservas tus óvulos contarás con el máximo de probabilidades para conseguir el embarazo cuando tu lo desees.
Gracias a los avances médicos en tratamientos reproductivos, contamos con la preservación de la maternidad a partir de la vitrificación de óvulos, entre otras técnicas. Es un nuevo campo de actuación dentro de la reproducción asistida que hace posible que las mujeres que deciden retrasar su maternidad por motivos personales o aquellas que deban hacerlo por motivos médicos, puedan tener hijos en un futuro. El objetivo principal de preservar la maternidad es dar alternativas para proteger la posibilidad de embarazo en una mujer cuando la fertilidad pueda verse comprometida por el tratamiento de alguna enfermedad (generalmente cáncer), cuando una mujer decida retrasar la maternidad o en otras situaciones menos frecuentes. A continuación te presentamos una serie de preguntas que te ayudarán a aclarar conceptos sobre la preservación de la maternidad
A continuación te presentamos una seria de preguntas que te ayudarán a aclarar conceptos sobre la preservación de la maternidad
¿Qué es la preservación de la maternidad?
Es un conjunto de técnicas que permiten que personas que deben o quieren retrasar su deseo de ser padres, tanto por motivos médicos como personales, puedan mantener su capacidad de tener hijos en un futuro mediante un tratamiento de reproducción asistida.
¿A quién se recomienda?
Además de las mujeres jóvenes diagnosticadas de cáncer que van a recibir quimioterapia o radioterapia estaría indicado en aquellas pacientes con enfermedades autoinmunes como lupus o artritis reumatoide, que vayan a ser tratadas con citotóxicos. También es recomendable en mujeres jóvenes con endometriosis severa y en general a las pacientes que por la razón que sea (cuestiones laborales, búsqueda de estabilidad económica, mujeres sin pareja o con pareja pero sin deseo de embarazo en ese momento) desean posponer su maternidad.
¿Qué razones principales existen para preservar la maternidad?
- Razones sociales: las mujeres que desean retrasar la maternidad por motivos personales u otras circunstancias.
- Razones médicas:
- Tras un diagnóstico de cáncer, con el consentimiento del médico oncólogo, y antes de realizar la terapia oncológica.
- En casos de enfermedades o intervenciones quirúrgicas que puedan afectar a la fertilidad.
- Ante un diagnóstico de baja reserva folicular (células situadas en el interior del óvulo), ya que los folículos no se regeneran y su número va disminuyendo a medida que la mujer envejece.
¿Qué técnicas se utilizan para la preservación de la maternidad?
En el caso de las mujeres existen técnicas médicas y quirúrgicas, pero los métodos de preservación más frecuentemente usados son:
- Criopreservación de óvulos. Tras un tratamiento hormonal para que los ovarios produzcan un número adecuado de óvulos, éstos se extraen mediante una intervención ambulatoria que no dura más de 20 minutos (punción folicular). Seguidamente se criopreservan los ovocitos mediante técnicas de vitrificación. Los óvulos permanecen almacenados hasta que sean requeridos por la paciente, siempre antes del fin de la edad reproductiva de la mujer.
- Criopreservación de embriones. En esta técnica, además de obtener los óvulos de la paciente, se realiza una fecundación in vitro con semen de la pareja o de un donante. Estos embriones se criopreservan mediante vitrificación.
- Criopreservación del tejido ovárico. Mediante cirugía laparoscópica se obtienen fragmentos de tejido ovárico, los cuales se criopreservan y se utilizan en el momento que la mujer lo necesite.
¿Qué sucede después del proceso de la preservación?
¿Qué sucede después del proceso de la preservación? Una vez dado el paso de preservar tu fertilidad, en el Instituto de Fertilidad tendremos tus óvulos, embriones o tejido ovárico congelados en contenedores especiales hasta que llegue el momento en que decidas ser madre.
¿En qué consiste la preservación de la fertilidad en el hombre?
En el hombre, así como en el caso de la mujer, también es posible preservar la fertilidad con una serie de técnicas. Los métodos más comunes son los siguientes:
- Criopreservación del semen. Se determina el número de muestras de semen necesarias para disponer de los espermatozoides suficientes para su posterior uso reproductivo, teniendo en cuenta la calidad espermática.
- Criopreservación del tejido testicular. Mediante una biopsia se obtendrá una pequeña porción de tejido testicular, el cual se preservará y utilizará en el momento necesario mediante técnicas de reproducción asistida.